Cómo es el niño Sagitario

Los niños en su interior son un universo. Todos sin excepción, están llenos de grandes emociones, pensamientos y cualidades. Explotarlas y guiarles por buen camino, no es tan sencillo como lo parece. Es por ello, que debemos conocerlos a la perfección. La astrología como ciencia, es la única capaz de describir cualquier tipo de persona. Desde su nacimiento, por medio de la posición de los astros, podemos desde pequeños canalizar las energías de los niños para sacarles el mayor provecho. Específicamente, el niño Sagitario es uno de los más carismáticos e inteligentes de toda la rueda zodiacal. A continuación, te contamos más detalles sobre su personalidad.

La personalidad del niño Sagitario

Los niños pertenecientes a este signo nacen entre la fechas del 22 de Noviembre al 21 de Diciembre. Además, están regidos por el planeta Júpiter que los llena de buenas vibras y positivismo durante toda su vida. También pertenecen al elemento fuego, el cual les da un alma muy poderosa e intuitiva. Desde pequeños son grandes exploradores, recopilando información de todas las situaciones posibles. Muy poco muestran miedo a los retos, siempre dicen que sí a todo y son muy solicitados para los eventos sociales. Su forma particular de ver la vida, los hace superar rápido los problemas, no hay obstáculo que el niño de Sagitario no pueda superar.

Son personas organizadas, en su escuela se mantienen limpios y muy tranquilos. Prefieren los juegos donde ellos sean los guías, demostrando así toda su sabiduría. A pesar de ser niños, son muy maduros y toman decisiones de manera directa y sin rodeos. Esa es su mayor virtud: la honestidad. Sus actividades van a un ritmo que nadie puede soportar, solo ellos con su alma y espíritu son capaces de lograr pocas cosas en tiempos reducidos.

Su relación con los demás

El niño Sagitario se lleva bien con los de su entorno familiar y amistoso. Sobre todo, con aquellos amigos que sean maduros e inteligentes como ellos. Son muy buscados por los grandes grupos, ya que ellos aportan esa chispa de energía y carisma que necesita el entorno. Donde hay un niño de este signo hay alegrías, aventuras y conocimientos. Además, son muy independientes, pero escuchan a sus padres en todo momento. Desobedecen no porque lo deseen, sino para hacer las cosas a su manera. Destacan por ser activos, tener muchos amigos y ser elogiados por todos. Tienen un temperamento imponente, pero muy perceptibles a su entorno, y saben callar cuando se necesita.

¿Qué les gusta hacer?

Estos chicos son muy conversadores, atentos y organizados en todo momento. Les encantan los espacios abiertos que tengan contacto con la naturaleza. Son los niños modernos, buscan siempre estar de la mano con las nuevas tecnologías. Cuando se enojan, se distancian para analizarse a sí mismos. Durante estos momentos, lo mejor es dejarlos en paz para que apacigüen sus llamas. Mientras pueda, estará corriendo en el parque, en una bicicleta o explorando una nueva aventura.